La Venta del Celemín es un lugar especial. Para algunos, es la casa del ermitaño, el mismo que recibió a Don Quijote y Sancho Panza tras la aventura de la cueva de Montesinos, tal y como viene relatado en el capítulo XXIV de la segunda parte de la novela:
«Junto con la ermita tiene una casa, que él ha labrado a su costa; pero con todo, aunque chica, es capaz de recibir huéspedes».
Según otras fuentes, se trata de la venta en la que transcurre la aventura del retablo de Maese Pedro. Además de las evocaciones literarias, la Venta del Celemín es una preciosa y antigua edificación manchega, que cuenta con todas las características arquitectónicas del estilo regional, y en la que el inmaculado fondo blanco de la cal de sus muros se combina con el luminoso azul añil manchego.
La casa ha sido cuidadosamente restaurada para preservar todos aquellos elementos antiguos que afirman su personalidad. Sus techos de vigas de madera de sabina acogen un mobiliario y una decoración de fondo quijotesco que quiere reafirmar el carácter único a la hora de disfrutar de la estancia en la casa.
El inmueble dispone de 4 dormitorios: 2 dormitorios en la planta alta (uno de ellos en suite) y 2 dormitorios en la planta baja.
En la Venta del Celemín se organizan periódicamente eventos de diverso tipo, tales como actuaciones teatrales, recitales de poesía, degustaciones de productos locales y catas de vinos, etc. Así, el 23 de abril de 2016, y celebrando el IV centenario de la muerte de nuestro más genial escritor, Miguel de Cervantes, participamos en el homenaje al mismo que tuvo lugar en la Cueva de Montesinos y la posterior actuación teatral en nuestras instalaciones.
El conjunto del inmueble se completa con un apartamento independiente de unos 30m2, que cuenta con acceso exterior propio y terraza cubierta.
El apartamento incluye un dormitorio doble, baño con ducha y una pequeña cocina totalmente equipada, además de una estufa-chimenea de leña, televisión HD e Internet.